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Algunos comentaristas de farándula no entienden que nada se gana atacando a los artistas inmersos en la adicción a las drogas. Lo que necesitan figuras como Alex Bueno y Carlos Manuel (El Zafiro), entre otros, es consejos. Si se los critica con saña, diciendo por ejemplo, que no quieren dejar el vicio, no se hace lo correcto. Los adictos a estupefacientes son enfermos. Esos cantantes requieren de la solidaridad de sus compañeros y los verdaderos cronistas pueden aportar, no así gente que se ha enganchado al oficio para buscársel y que frecuentemente incurre en irrespeto.

Tanto Alex como El Zafiro son dos figuras emblemáticas del merengue de los ochenta. Gente como Fernando Villalona, quien dilapidó una fortuna en drogas, y gracias a Dios, aunque intentó autodestruirse no lo consiguió, puede darle la mano a Alex y El Zafiro. El Mayimbe es ejemplo de que se puede echar al zafacón el dañino vicio de las drogas que lo único que consiguen quienes están inmersos en ese equivocado camino, es destruirse y hacer daño a sus familiares quienes viven amargos momentos cuando los ven camino de palo para leña.