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Caracas,(Venezuela).-‘El 2014 es para ganar el Miss Universo’, y así será con el favor de Dios y mi Chinita“, manifestó la Miss Venezuela 2013, Migbelis Castellanos.

“Ya no existe cábala, rompimos con ese estigma y demostramos que la zulianas no solo ganan en el año que tenga cuatro. Muchos me decían que esperara al 2014 para participar, pero yo les decía:
Durante una entrevista con el diario La Verdad, la mujer más hermosa de nuestro país señaló que no tiene una fecha definida para ir al estado Zulia: “Espero que sea muy pronto. Estos próximos días sabré cuándo puedo ir. Quiero compartir con mi gente que siempre me ha apoyado en todo. Abrazarlos y estar con mi familia y amigos. Además también iré a Maracaibo, para agradecerle a mi Chinita y a Dios que siempre me cuidan”.
Asimismo, Castellanos indicó que “la misma Migbelis que estuvo en el escenario del Poliedro es la misma que te puedes encontrar caminando por la calle, sin posturas y sin falsedades, y eso es algo que me inculcaron desde pequeña, a tener valores“.
Detalló que al culminar sus compromisos con la organización seguirá con sus estudios en Comunicación Social y expresó que desea ser la próxima Maite Delgado, “ella dejó ese vacío en la animación del Miss Venezuela y a mí me encantaría tomar su lugar, es una gran mujer y un gran ejemplo a seguir. Voy a trabajar para ganarme ese puesto”. 
A continuación el texto completo publicado por el medio:
Con todos los pronósticos en contra, miss Costa Oriental resultó la ganadora de la sexagésima primera edición del Miss Venezuela. Su vida dio un giro de 180 grados al anunciarse su triunfo. Caracas ahora será su residencia permanente.
Alegre y dispuesta, así conversó desde la Quinta Miss Venezuela, Migbelis Castellanos, miss Venezuela 2013, con La Verdad. Luego de un cordial saludo aseguró: “Estoy emocionada por hablar con mi gente del Zulia”. Sobre la visita a su Cabimas natal, la verdad expresó que aún no sabe cuándo podrá ir a su casa.
“Espero que sea muy pronto. Estos próximos días sabré cuándo puedo ir. Quiero compartir con mi gente que siempre me ha apoyado en todo. Abrazarlos y estar con mi familia y amigos. Además también iré a Maracaibo, para agradecerle a mi Chinita y a Dios que siempre me cuidan. El 16 de diciembre lo más seguro es que me tendrán bailando chimbángueles para agradecerle a san Benito”.

No existe cábala

La joven, de 18 años de edad, no pierde su enfoque y su meta es lograr la corona en el Miss Universo 2014. “Ya no existe cábala, rompimos con ese estigma y demostramos que la zulianas no solo ganan en el año que tenga cuatro. Muchos me decían que esperara al 2014 para participar, pero yo les decía: ‘El 2014 es para ganar el Miss Universo’, y así será con el favor de Dios y mi Chinita”.
Parte de su éxito se lo debe al trabajo constante. Aunque se transformó rápidamente en una mujer, conserva su naturalidad y humildad.
“Las personas que me siguen en Twitter y en Instagram se han dado cuenta de mi crecimiento durante todo el proceso que viví en Todo por la Corona.En las clases con el profesor Briceño intenté absorber lo más que pude y creo que eso lo reflejé al momento de responder”.
Aunque no era la favorita, los missólogos con experiencia le apostaban a ella. Migbelis sabe que su logro es gracias a la constancia. “Cuando el ‘Pollo’ (Erick Simonato) dijo que salíamos en 10 (segundos) al aire antes de anunciar a la ganadora me encomendé a Dios y respiré profundo, y dije: ‘Voy a disfrutarme al 100 por ciento este momento’. Salí con todo lo que tenía natural, la misma Migbelis que estuvo en el escenario del Poliedro es la misma que te puedes encontrar caminando por la calle, sin posturas y sin falsedades, y eso es algo que me inculcaron desde pequeña, a tener valores”.

Reencuentro familiar

Su primer día como reina estuvo lleno de compromisos, pero eso es parte del trabajo. La rubia de ojos verdes explicó que está disfrutando de su momento, pero pensó que por ser la más joven del concurso los periodistas serían muy duros con ella durante su primer encuentro con la prensa. “Todo lo contrario, fueron muy amables”.
Una de las cosas que extraña desde que se mudó a la capital son sus estudios, los cuales retomará cuando culmine su año de reinado.
Contó que al finalizar su primer día como Miss Venezuela regresó a su casa para descansar y le pareció raro ver las luces apagadas.
“Llegué y le pregunté a mi mamá por mi papá y mis abuelos, me dijo que estaban fuera comiendo. Las luces de la sala estaban apagadas, cuando las encendieron todos gritaron: ‘Sorpresa’, lloré de la emoción por ese gesto tan lindo. Hasta el cansancio que tenía se me olvidó y me dieron las 12.00 de la noche hablando con ellos de cómo la pasé en el certamen”.