Viviana Gibelli sobre las misses de su época: "No éramos patatas, pero si más recatadas"

lunes, 29 de julio de 2013 16:34 By Augusto Socìas

Viviana Gibelli conduce el reality Miss Venezuela: Todo por la Corona que transmite Venevisión y tras sus años de experiencia afirma que “aunque la corona es el objetivo principal para las participantes, también hay otros premios que pueden ganar”.
A continuación una entrevista que realizó El Nacional donde detalla a profundidad la experiencia de esta destacada exmiss.
—¿Qué distingue este Miss Venezuela de los anteriores?
—Las candidatas siempre han tenido buena preparación, pero en este caso va a ser mayor, porque será supervisada por el país, por Latinoamérica y por el mercado hispano en Estados Unidos. Las misses tienen más presión y más proyección y yo estoy ahí para recordarles eso, porque el Miss Venezuela es ahorita, pero tendrán toda una vida para aprovecharlo. Este momento puede definir sus vidas, como lo hizo con la mía.
—¿Cuáles son las diferencias entre una candidata de antes y una de ahora?
Vienen mucho más informadas que las de antes. El concurso se ve más, está más abierto. Vienen más preparadas, más montadas. En mi caso, veo que antes había mayor grado de ingenuidad, no éramos pacatas pero sí más recatadas. Había otros parámetros de belleza, era más conservador. Han pasado 25 años desde que concursé ¿y qué no ha pasado en ese tiempo? Si se mide a nivel de tecnología, de todo. Si se mide a nivel de país, ha retrocedido (risas).
—¿Cómo compagina la televisión con su papel de madre?
—La verdad es que no sé. Hay momentos en los que me provoca halarme los cabellos y digo “Dios mío, ¿cómo hago?” y me pongo a llorar, pero ya. Es como todo, uno drena un ratico y ya. Hay días en que amaneces con una fortaleza increíble y todo sale perfecto. Pero hay otros que no. Con el reality ha sido fuerte, porque hemos grabado bastante, pero la comunicación es muy buena con mis hijos y aunque están chiquitos lo entienden. Ellos entienden que mamá trabaja, ven televisión y saben que mamá está ahí, son conscientes de lo que hago.
—En una entrevista reciente dijo que 2011 fue un año muy difícil. ¿Cómo evalúa eso hoy? ¿Qué descubrió durante esa etapa?
—Descubrí que tengo una fortaleza enorme, que son mis hijos. No me quejo de nada, no tengo derecho a hacerlo. Agradezco todo lo que me pasa en la vida porque todo pasa por algo. No sólo por ese año sino porque la vida se ha encargado de demostrarme que todo lo que sucede, sea lo que sea, ocurre por algo mejor, aunque no se vea inmediatamente. Ese año lo pasé como en automático, porque no me podía dar el lujo de caer. Luego procesé todo, pero no me preguntes cómo lo hice. Sí tomé antidepresivos un tiempo, porque fue muy fuerte. Ahora todo lo que llega lo agradezco, hasta lo que aún no tengo. Disfruto de la vida, de las cosas sencillas. Después de eso me siento una mejor persona. Estoy en otra etapa, más sabrosa, más relajada y más tranquila. Y simplemente espero que la vida me sorprenda con cosas mientras yo sigo haciendo las mías.
Epígrafe
“Me siento una mejor persona. Estoy en otra etapa, más sabrosa, más relajada y más tranquila. Y simplemente espero que la vida me sorprenda con cosas mientras yo sigo haciendo las mías”
Por: Karla Franceschi C. (El Nacional de Caracas).

0 comentarios: