Yaguaza.com

Los árboles, el atardecer, la intimidad de un pequeño estudio de grabación en medio del bosque, y de fondo, Thalía cantando “Love me tender”. Todo estaba en armonía para la “aparición” de Elvis Presley.

“Los pocos que estábamos ahí —recuerda Thalía— sentimos una transfiguración. Definitivamente El rey del rock estaba con nosotros”.

El Circo del Sol estrenó en marzo de este año Viva Elvis, un espectáculo que se presenta desde entonces con funciones agotadas en el Hotel Casino Aria y que incluye creativas reinterpretaciones (de melodía e instrumentación) de las canciones más populares y famosas de Elvis Presley.

La semana pasada se puso a la venta un disco que recopila estas versiones nuevas. En la edición mexicana del disco, Sony Music decidió incluir un dueto de Elvis con Thalía, con lo que se convirtió en la primera cantante hispana en cantar junto a Presley, aunque sólo fue a través de la digitalización de su voz.

El éxito del disco fue tan instantáneo como el espectáculo de Las Vegas. Pero a Thalía lo que le importa es que “Elvis fue tangible” durante ese par de horas de duró la grabación,

¿Qué fue lo primero que pensaste cuando te propusieron cantar a dueto con Elvis “Love me tender”?

Me quedé sin habla, me quedé en un estado de shock. Cuando era niña, en mi casa teníamos todos sus acetatos, comprábamos todos sus LP con las portadas espectaculares. Mi mamá fue una gran fan de Elvis y tenía todos sus discos y siempre me ponía a oírlos.

¿Qué dijo ella cuando te escuchó cantando junto a Elvis?

Cuando le hablé para mostrarle la canción, ella no podía creerlo: ahí estaban juntos su ídolo y su hijita. “¡No lo puedo creer!”, me repetía. Ella manejó mi carrera durante mucho tiempo, así que también fue motivo de orgullo, un sueño compartido por ella.

¿Dirías, como mucha gente suele afirmar, que Elvis Presley sigue vivo?

Sentí su presencia. Grabamos la canción en un pequeño estudio muy íntimo y ubicado en medio de un bosque. Éramos muy pocas personas involucradas en la producción y hubo un momento en que sentimos una transfiguración. Fue como si Elvis hubiera decidido trasportarse en el tiempo y el espacio. Se apareció en ese lugar para estar con nosotros en la grabación.

¿Cómo explicas esta presencia? ¿Metafísica, magia, espiritualidad?

Siento que hay ciertos seres humanos que tienen una misión de cambiar a la sociedad con sus ideas, y Elvis fue uno de ellos. Él rompió con una estructura de interpretación, cambió muchas cosas socialmente y a nivel global con su forma de ser y sus acciones

¿Qué crees que habrá dicho Elvis al escucharte cantar “Love me tender”?

Creo que dijo: “Hasta que se me hizo cantar con una latina”. Porque así es: ahora tengo la fortuna de ser la primer artista hispana en cantar con él.

¿Habrá dicho: “Que bueno que esa primera hispana fue Thalía”?

Ojalá. A estas alturas de mi carrera, te aseguro que esta canción a dueto es uno de los galardones más importantes y lo mejor de todo es que nunca me lo podrá quitar nadie.

Se ha dicho que incluso llegaste a llorar en la grabación del tema. ¿Es cierto o es una exageración?

Tuve un nudo en la garganta todo el tiempo que estaba cantando.

Cuando terminamos y le dimos play, entonces todos los que estábamos ahí teníamos los ojos aguados. Yo, definitivamente me puse a llorar

¿Cuál es tu canción favorita de “El rey del rock”?

“Love me tender” es una de ellas. Pero otras son “Don’t be cruel” y “Los zapatos de ante azul”.

¿Tienes película favorita?

No. No te podría decir alguna favorita en este momento. Pero sí tengo un concierto favorito, aquel que hizo en un escenario pequeño, una especie de unplugged en el que aparece vestido con un traje de cuero negro.

Si fuera posible imaginarse que tuvieras dos minutos con Elvis Presley ¿Qué querrías decirle?

Le agradecería el legado que nos dejó. ¡Y le diría que lo quiero llevar a México! Subírmelo en un avión para llevarlo a que conozca la gente, echarnos un tequilita y unos taquitos. Que conozca ahora sí el verdadero valor de lo que es nuestro país.

Y que fuera a conocer a tu madre.

Mi mamá, seguro que estaría pegada a nosotros todo el tiempo. (El Universal).