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Un juez en las Bahamas retiró el lunes los cargos contra dos personas acusadas de tratar de extorsionar al actor John Travolta luego de la muerte de su hijo en el archipiélago.

El fiscal Neil Braithwaite presentó una moción para sobreseer la causa, a pedido del actor y su familia.

Braithwaite dijo que el caso le había causado a la familia Travolta ''un estrés increíble'' y que ellos deseaban olvidarlo.

El chofer de ambulancia Tarino Lightbourne y su abogado, el político Pleasant Bridgewater, fueron acusados de amenazar con revelar información privada sobre la muerte en enero del 2009 del hijo de 16 años de Travolta, Jett, en la casa de la familia en la Gran Bahama, una de las islas más al norte del archipiélago.

Lightbourne, que estuvo entre los médicos que trataron a Jett, presuntamente demandó 25 millones de dólares del actor con ayuda de Bridgewater, que renunció a su escaño en el Senado de Bahamas luego de ser acusado en el caso.

La decisión se produce cuando estaba a punto de comenzar un nuevo juicio de los dos acusados de intentar extorsionar a Travolta por 25 millones de dólares. En octubre se declaró un juicio nulo en el caso luego que un legislador indicase que el jurado, que aún deliberaba, había absuelto a uno de los acusados.

Travolta había declarado en el juicio y uno de sus abogados dijo en octubre que el actor estaba preparado para declarar de nuevo si era necesario. Travolta dijo el lunes, sin embargo, que la demora en reanudar el caso había motivado su decisión de no volver a declarar.

''La larga espera continuó cobrando un fuerte saldo emocional a mi familia, y nos hizo decidir que era hora de finalmente concluir este asunto'', dijo.

''Por tanto, luego de mucha reflexión concluí que lo mejor para mi familia era no regresar a las Bahamas para declarar una segunda vez en el juicio''.