Yaguaza.com

A decir verdad miles de personas viven en una especie de toque de queda encerrándose en sus hogares temprano por temor a ser atracados. Lo cierto es que la delincuencia no ha sido combatida por todos sus frrentes.

La Policía se ha focalizado en eliminar antisociales, con lo que no se consigue erradicar el problema, que en los últimos años se ha incrementado y no sólo se sietne en barrios de clases baja y media, tambien está presente en sectores de clase alta.

Se impone que las autoridades pasen de las palabras a los hechos. Hay que ir a la raíz del problema que comienza en los hogares de personas pobres que en muchos casos no tienen comunicación con sus hijos. Influye adfemás, la paternidad irresponsable, hijos que crecen bajo el amparo de la madre que tiene que trabajar porque el padre no cumple con su responsabilidad.

Es alarmante el número de adolescentes embarazadas por falta de conciencia que se ven precisadas a abandonar sus estudios para mantener a sus criaturas. Algunas caen en la prostitución.

Un estudio realizado entre las niñas que ejercen prostitución en el parque Enriquillo de la avenida Duarte establece que éstas tienen edades que oscilan entre 10 y 13 años, y han ingresado a esa actividad luego de ser víctimas de lo que llaman "manigua", violación por parte de un grupo.


El Código del Menor contribuye con la delincuencia proque las penas que establece son mínimas para muchachos que cometen crímenes, ñpor lo que se impone modificarlo.

Finalmente, tiene que existir voluntad política para encarar el problema antes de que sea demasiado tarde. Matando delincuentes no desaprece el flagelo, como erróneamente creen algunos, inclouyendo autoridades miltiares. Hay que embarcarse en las raíces y apra eso, además de voluntad política, se requeire recursos.
También, se dan casos de padres que toleran que sus vástagos se inserten en la delincuencia, y aceptan dádivas de éstos, lo que los estimula a continaur en el denominado bajo mundo.