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La última película de James Cameron, la cinta de animación tridimensional "Avatar", ha roto récords de taquilla en China en sus dos primeros días de proyección, con 9.7 millones de dólares de recaudación, a pesar de las gélidas temperaturas, informó hoy a Efe la empresa productora.

La recaudación del día del estreno, el lunes, fue de 4.8 millones de dólares (33 millones de yuanes), por lo que la película protagonizada por Sam Worthington y Zoe Saldana, que ha recaudado ya más de mil millones de dólares desde su estreno mundial en todo el mundo, puede romper todos los récords en China.

Y eso a pesar de que Pekín registra sus temperaturas más bajas en décadas, con una media de 10 grados bajo cero el lunes, y del alto coste de la entrada para ver la versión en 3D, de 22 dólares al cambio.

"Hemos batido el récord de taquilla en los primeros días de estreno", señaló hoy a Efe Fay Xie, directora de operaciones de la productora y distribuidora 20th Century Fox International China.

Con "Avatar", Cameron parece destinado a volver a hacer historia en China, once años después de que su "Titanic" recaudara 43 millones de dólares, un récord imbatible hasta que el año pasado lo superaron "Transformers: Revenge of the Fallen" y "2012", con 63 y 67.5 millones de dólares, respectivamente.

Según Xie, "Avatar" puede conseguir en las próximas semanas una recaudación superior a los 73 millones de dólares.

La sucesión de récords en el último año indica la creciente importancia que China ha adquirido en el sector cinematográfico, y ello a pesar de que las autoridades limitan la proyección de filmes extranjeros a veinte por año, con taquilla compartida, para proteger la industria local.

A pesar de estas restricciones, según Xie, "Avatar" también puede superar los últimos grandes récords de producciones locales de 2009 como "The founding of a Republic", de Huang Jianxin, con 66 millones de dólares, "Red Cliff", de Jonh Woo, y "A simple noddle story", del prestigioso Zhang Yimou, todavía en las salas.

En 2008, la taquilla del país asiático aumentó un 30.5 por ciento hasta los 629 millones de dólares, lo que la convierte en una de las más importantes del mundo.

Sin embargo, esta recaudación se enfrenta en China a las continuas violaciones de los derechos de propiedad intelectual.

"He visto que ya hay copias pirateadas en el mercado y que se está descargando la película de forma ilegal en internet. Pero la gente cree que ir al cine es la mejor manera de disfrutar de la película de James Cameron, por lo que no tengo miedo", aseguró la directora.