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A decir verdad pocos creen en el desenlace del supuesto secuestro del joven Eduardo Baldera, quien después de 22 días en presunto cautiverio apareció vestido con con camisa crema mangas largas, jean azul y tenis, distinto al vestuario que tenía el día que habría sido raptado que tenía camiseta blanca, pnatalón negro y sandalias.

Lo cierto es que pocos creen en la versión de Baldera Gómez, quien dijo que nunca vio los rostros de los secuestradores porque se mantenían con capuchas, y lo tuvieron en una choza de yagua. Muchos cuestionan cómo pudo escapar, ya que declaró que le habrían dejado las esposas flojas y alcanzó romper la cadena con éstas, y que practicaba la acción.
¿Cómo se explica que huyera y caminara durante más de cuatro horas sin que uno de los supuestos secuestradores que habría salido de la choa cepillarse los dientes lo persiguiera?
¿Y de qué manera pudo recorrer durante horas una zona que no conocía sin ser perseguido por sus captores..?

¿Qién va a dar crédito del supuesto secuestro, después que consiguiera escpara de un cautiverio de más de veinte días en el que estuvo esposado y encapuchado alimentándose con galleticas, salami, queso y leche, y luego aparecer con fuerza para subirse en una jeepeta sonriendo como si nada hubiera ocurrido..?

El jefe de la Policía, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín debe tener en cuenta que todavía continúan por esclarecer excesos cometidos en el transcurso de las indagaciones y la persecución de los presuntos cabecillas del plagio.

Todos recibimos con alegría que Baldera Gómez retornara asano y salvo a su casa. Sin embargo, pocos, muy contados, se han tragado los resultados del supeusto secuestro y la "protagónica" actuación de la Policía en el mismo.