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La piratería perjudica el negocio del disco. En el caso de República Dominicana inciden además, los elevados precios de los cidís que en algunos casos superan los mil pesos, en una nación con mayoría de empleados públicos y privados devengando salarios entre 5 y diez mil pesos. Esto equivale a que constituye artículo de lujo para ese segmento adquirir un cidí original. De ahí que por sus limitaciones financieras compran discos pirateados a 50 y 60 pesos. Empresarios consultados dijeron que son altos los impuestos qeu cobra Aduanas por discos importados. Deben disminuirlos. Los mismos disqueros del patio, probablemente sin proponérselo, también han aportado a la piratería, pues venden cidís "económicos" a 100 y 125 pesos. Si a esto agregamos que las autoridades no encaran la piratería de discos y películas, que esos artículos se venden en las narices de policías como si se tratara de plátanos, berengena, etc., en este país el negocio discográfico languidece.