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A decir verdad Acroarte debe convocar a una asamblea para modificar los reglamentos respecto a la entrega de El Soberano, máximo galardón de los premios Casandra.
No se debe continuar ignorando la trayectoria de figuras como Johnny Pacheco, Félix del Rosario, Mario de Jesús e Ivonne Haza de Bisonó, entre otros.
Dejémonos de pendejadas, en vez de una estatuilla deben entregar dos o tres el próximo año, no esperar que desaparezcan físicamente esas y otras glorias para reconocerlos.
Marivell Contreras, presidenta de Acroarte está a tiempo de poner los pies sobre la tierra desde ya junto a los demás directivos y fortalecer la incidencia del gremio haciendo justicia con artistas que tienen sobrados méritos para recibir El Soberano.
Ah, también hay que establecer que aquellos que reciban la estatuilla no vuelvan a competir por la misma.