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Llama la atención la indiferencia mostrada por diputados, regidores, dirigentes políticos y algunos que se autoproclaman "dirigentes comunitarios", frente a la escasez de agua potable, los apagones y la delincuencia que se apoderó de barrios y urbanizaciones de Villa Mella, Santo Domingo Norte.

Todo parece indicar que los diputados-electos por la comunidad-sólo tocan los problemas en tiempo de elecciones. Luego, espantan la mula y ni siquiera se pronuncian en el hemiciclo. Y eso, que a expensas de los contribuyentes se enbolsillan 175 mil canoas mensualmente, gastos de representación chofer, combustible, secretaria, asistente y mensajero. Además, el irritante privilegio, respaldado por los partidos, de dos exoneraciones, una abierta que venden. !Bárbaros!